Leaders League: ¿Cuáles han sido los cambios regulatorios recientes más importantes en materia de cumplimiento y prevención de riesgos en Argentina y cuál ha sido su impacto en el sector?
Federico Gottlieb: El cumplimiento en Argentina es un fenómeno relativamente nuevo que comenzó en serio en 2018 cuando llegó la Ley de Responsabilidad Penal Empresarial. Así, para empresas con un determinado número de empleados y nivel de facturación, se ha convertido en obligatorio contar con un responsable de cumplimiento interno. Anteriormente esto era opcional.
¿Qué cubre esta ley?
Las empresas están obligadas a contar con un programa de integridad, que consiste en un reglamento interno para combatir la corrupción en términos generales. En Argentina, la conducta es sancionada si viola leyes debidamente codificadas. La corrupción siempre fue sancionada pero la diferencia era que antes no se podía sancionar a las empresas, solo se sancionaba a las personas naturales, ahora también se sanciona a las personas jurídicas.
Con la pandemia, mucha evolución en el cumplimiento tuvo que adaptarse a las nuevas circunstancias. Por ejemplo, la prevención de riesgos tuvo que adaptarse a la emergencia.
¿Qué impacto específico ha tenido la ley para el sector?
Las empresas todavía se están adaptando a la ley. En Argentina, las empresas no estaban acostumbradas a tener que implementar completamente medidas de cumplimiento; conceptualmente lo apreciamos porque todas las empresas del Grupo Arcor tienen un alto código ético que regula a toda la empresa, entonces esta nueva ley se basó en lo que estábamos haciendo por convicción de todos modos, solo teníamos que ajustar las normas y procedimientos internos, desde la producción hasta las ventas, en respuesta a ello.
¿Cómo te afectó la pandemia y qué oportunidades de mejora encontraste?
Al ser una empresa de alimentos, éramos trabajadores esenciales. Tratamos de mantener el trabajo. Aunque ya estábamos evolucionando en cuanto a tecnología, esto aceleró todo. Afortunadamente estábamos preparados para ello. Para nosotros tuvo un gran impacto porque, además del cumplimiento, me encargo de los aspectos legales, no solo en Argentina, sino también en Chile, Brasil y otras oficinas y con el hecho de que no podíamos viajar, organizando todo lo que teníamos de forma remota. un impacto muy grande en la gestión diaria.
Una vez que nos hicimos cargo de la situación, pudimos contener la organización del personal y también el impacto psicológico en los trabajadores, teniendo reuniones semanales para poder compartir experiencias laborales, así como problemas personales. Esto ayudó a preservar la salud mental de los trabajadores.
Además, pudimos hacer capacitaciones virtuales a nivel general de la empresa. La tecnología brindó una oportunidad de mejora, permitiéndonos agilizar las reuniones e incluir a más personas en ellas.
¿Cómo contribuyó su experiencia previa como gerente legal de la empresa al cargo que ocupa hoy?
Fue muy importante porque, además de los conocimientos técnicos que tienes que tener, debes conocer gente; la posición de una persona no siempre te dice lo suficiente sobre quién es esa persona. En una empresa hay personas que no tienen un puesto elevado pero sí mucha responsabilidad. Es muy importante conocer los conceptos básicos de la empresa para poder ascender en la escala.
Además, la capacitación regular lo mantiene informado, refresca sus conocimientos y lo ayuda a anticipar problemas y resolver problemas que antes quizás no haya podido.
¿Cuáles cree que son las habilidades más importantes que debe tener un abogado corporativo hoy en día?
La formación profesional en cada área es lo que más se debe enfatizar, la base es tener los conocimientos profesionales para empezar a participar en la vida de la empresa. Una vez que estés en condiciones de hacerlo, te recomiendo conocer de punta a punta el negocio en el que trabajas, es decir, desde la compra de la materia prima hasta la venta del producto y su distribución; es decir, conocer el proceso de producción, depósito, almacenamiento, logística, entrega a los clientes y, finalmente, cómo recibe el consumidor lo producido.
Si conoces bien tu negocio, todo es más fácil. Los abogados a menudo se enfrentan a situaciones de conflicto y para resolverlas es bueno tener más alternativas, por lo que entender el negocio de principio a fin ayuda a identificar oportunidades de mejora y evitar problemas que puedan surgir.
Dada la gran cantidad de cuestiones que pueden surgir, creo que no debemos centrarnos en una especialidad, sino ser generalistas. En una empresa tan grande nos convertimos en generalistas al adquirir muchos conocimientos en varias áreas de la profesión.
¿Eso implica dejar un poco atrás el rol tradicional de un abogado?
Sí, un poco.. El abanico es tan amplio que hay espacio para especialistas y también generalistas, pero personalmente y desde la perspectiva de la firma, creo que es fundamental ser generalista porque hay que saber valorar la importancia relativa todas las cuestiones que se presenten para estar en condiciones de saber cuándo conviene buscar un especialista.
¿Qué logro personal le ha dado mayor satisfacción durante su actual rol en Arcor?
Llevo 18 años en la empresa y he vivido muchos momentos de satisfacción personal y profesional. En términos generales, los últimos procesos de M&A y joint ventures con empresas extranjeras en los que he participado me han dado mucha satisfacción por la magnitud de las transacciones y los exitosos resultados que hemos tenido.
¿Qué espera el departamento jurídico de una empresa de los despachos de abogados con los que trabaja?
Espero que nos ayuden a resolver todos los problemas internos. Por regla general, tratamos de manejar todo internamente, pero cuando algo requiere experiencia externa, solicitamos el apoyo de firmas externas.
Contratamos especialistas. Cada tarea que asumimos requiere de un asesoramiento especializado, que puede ser una consulta puntual o el acompañamiento a lo largo de un proceso, como en el caso de una M&A, donde aunque llevamos el proceso nosotros, el apoyo externo es fundamental.
“Escritor amigable con los hipster. Entusiasta de la televisión. Organizador. Emprendedor general. Pionero de Internet”.