Activistas por los derechos de los animales protestaron en Buenos Aires el miércoles contra un posible acuerdo con China para establecer mega granjas porcinas en el país. Decenas de activistas que portaban bolsas de papel con cerdos dibujados en la cabeza se reunieron frente a la embajada china y gritaron consignas contra la crueldad animal.
Las negociaciones del contrato entre los dos países verán más de veinte granjas en diferentes provincias de Argentina criando cerdos y produciendo 900.000 toneladas de carne de cerdo en cuatro años. El gigante asiático fue golpeado por la peste porcina africana, que obligó al sacrificio de millones de cerdos en su territorio.
Según ambientalistas, este modelo de producción involucra millones de galones de agua mientras gran parte del país sufre sequía. Los activistas también afirman que el problema está afectando a la agricultura, ya que se están talando miles de hectáreas de tierra para cultivar maíz transgénico y soja para la producción de alimentos para animales, y las aguas subterráneas se están contaminando con excrementos de animales.
El gobierno de Alberto Fernández anunció a mediados de 2020 que mantenía conversaciones con China para avanzar en esta iniciativa, que traería divisas millonarias al país sudamericano. Ante la fuerte oposición de ambientalistas y sectores de la comunidad científica, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina dijo que la firma del acuerdo se suspendería hasta al menos noviembre para adecuarlo a las normas de protección ambiental, recursos naturales y bioseguridad.
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