San Luis, la provincia que provocó la caída del peronismo en Argentina

En 2018, el entonces gobernador de la provincia de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, fue anfitrión de una importante reunión peronista. Allí querían formar un frente contra el gobierno neoliberal de Mauricio Macri y ya pensaban en las elecciones de 2019. Cinco años después, la provincia, que era considerada uno de los bastiones peronistas, puso fin a 40 años de hegemonía de la familia Rodríguez Saá. , eligiendo un gobernador de la oposición. Y como presidente, los puntanos (locales no judíos) eligieron a Javier Milei con casi el 48% de los votos en las elecciones primarias de agosto. Fue la segunda provincia donde recibió más votos.

Ubicada en la parte central de Argentina, San Luis depende de la agroindustria y se enorgullece de su perfil conservador. Desde la redemocratización, el lugar es gobernado por dos hermanos: Adolfo y Alberto Rodríguez Saá del Partido Justicialista, principal partido del peronismo, fundado por Juan Domingo Perón. Pero al contrario de lo que se ve en el peronismo, que es más de izquierda y con bases sindicales en la capital Buenos Aires, el poder allí es casi coronalista.

Sobrevolando la capital, también llamada San Luis, es posible observar las calles construidas en línea recta en medio de la vegetación más seca. Durante su reinado, iniciado en 1983, Rodríguez Saá se dio a conocer por sus importantes obras que conmovieron a la ciudad. Según la gente, todo está en sus manos. La era de los grandes proyectos de construcción, los presupuestos enormes y la fuerte presencia gubernamental crearon una clase media fuerte.

En el apogeo de su popularidad, Adolfo sirvió como presidente de Argentina durante siete días después de que Fernando de la Rúa huyera del país durante la crisis de Corralito en 2001. Sin embargo, con el tiempo, la condición de la clase media comenzó a deteriorarse, hasta el día de hoy, con una inflación cercana al 140%, no quedan ingresos.

A esto se suma la edad de Adolfo, que pasó el testigo a Alberto, su hermano menor y menos popular. Alberto mantuvo la hegemonía familiar hasta ahora, cuando su candidato sufrió una derrota ante Claudio Poggi, el candidato de Juntos pela Cambiemos. “Nunca he visto otro gobierno que el de Rodríguez Saá”, dice Javier Pérez, de 23 años. “Hicieron cosas buenas, hay que reconocerlo, pero las cosas han cambiado. La economía es mala, la educación es mala, los valores morales son malos. Se necesita un cambio drástico”.

Pobreza

“San Luis ahora está siempre en el podio en cuanto a indicadores sociales negativos”, dice Charly Pereira, representante provincial de la coalición Juntos pela Cambio. “Así que hay un voto de venganza contra nosotros en la clase política, contra el status quo, porque no hay nada que perder”.

De hecho, São Luis hoy tiene peores indicadores sociales que los nacionales. Mientras que en Argentina la pobreza supera el 40%, en San Luis supera el 47%. Según el Instituto Argentino de Estadística, la provincia sería la tercera con más niños bajo el umbral de pobreza, después de Chaco y Formosa.

Ante este empobrecimiento, la población justifica por supuesto el cambio de rumbo político. También se citan con amargura los tiempos de la pandemia, cuando el gobierno implementó un estricto bloqueo y prácticamente aisló a la provincia del país. Al final, los hermanos pelearon entre ellos -por razones que no están del todo claras- y condujeron a una división en la hegemonía familiar que finalmente les costó el gobierno.

Sin embargo, el nuevo gobernador no es tan nuevo. Poggi gobernó San Luis de 2011 a 2015, aunque como parte de un gobierno peronista. Aunque no fue una ruptura, su victoria provocó un reproche local al peronismo.

Y más sorprendente que la derrota del gobierno provincial fue la abrumadora victoria de Milei. Javier Pérez fue uno de los que votó por Milei en las primarias y dijo que espera volver a votar por él en la primera vuelta mañana. Hace una comparación con su vida actual y la de sus padres, quienes pudieron comprar una casa y dar una buena vida a sus hijos a pesar de no tener educación. Él, que cursa un curso en el campo de la salud en la Universidad de San Luis, no tiene expectativas laborales.

“Este es un fenómeno en el que la sociedad se encuentra huérfana”, dice Matías Bianchi, politólogo nacido en San Luis y director del centro de estudios Asuntos del Sur, “porque el Estado, los empleos públicos -que constituyen la mayor parte del gasto público- “El empleo en las provincias es cada vez más precario. “Ven la necesidad de que algo cambie y todo lo demás explota”.

El caso más llamativo en la provincia se produjo en la pequeña localidad de Alto Pelado, a 100 kilómetros de la capital. El pueblo de poco más de 100 habitantes eligió a Milei con el 70% de los votos, lo que lo convierte en el pueblo que votó con mayor frecuencia por el candidato libertario.

La ciudad se caracteriza por la agricultura y los bajos ingresos y es atravesada por la línea del ferrocarril General San Martín, que atraviesa el país. “No me sorprende el importante voto a Milei en Alto Pelado, porque sobre todo en estos pequeños pueblos hay gente que carece de todo y que ve a Javier (Milei) como una opción de cambio”, explica Alfonso Recasens, estratega político que apoya el voto de Milei. coalición.

La información proviene del periódico. El Estado de S. Paulo.

Jacinta Rangel

"Escritor amigable con los hipster. Entusiasta de la televisión. Organizador. Emprendedor general. Pionero de Internet".

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *