Nietos y bisnietos de franceses en Argentina animan a la ‘Albiceleste’ – 17/12/2022

En los siglos XIX y XX, fue una de las migraciones de pueblos que más influyó en la Argentina y creó un “vínculo especial” con Francia. Pero de cara a la final del Mundial de este domingo, los nietos y bisnietos de los franceses tienen una cosa en mente: se quedarán con la Albiceleste hasta el final.

Nunca fueron tan numerosos como los españoles o los italianos, que venían en masa. No tenían tantas empresas y negocios como los británicos -que trajeron el fútbol-, pero los 230.000 franceses que se instalaron en Argentina a partir de la segunda mitad del siglo XIX dejaron su huella en el país, dijo a la AFP el historiador Hernán Otero.

Esto es evidente en el arte, en la arquitectura de Buenos Aires, en el “modelo cultural francés” de educación pública, en la viticultura y en la gastronomía. La especial relación entre los dos países fue alimentada por sus “mutuos y famosos exiliados”, artistas y escritores, sin olvidar la acogida que Francia brindó a numerosos argentinos perseguidos por la dictadura a fines de la década de 1970.

Gaetano Parrello, profesor de la Alianza Francesa de Buenos Aires, tenía 34 años en 1998 cuando Francia ganó su primera Copa del Mundo. Recuerda celebrar la victoria de los Bleus sobre Brasil, los rivales históricos de Argentina, en el Obelisco. Pero esta vez no será lo mismo.

– Giroud, Mbappé, sentimientos encontrados –

“Me gustan (Olivier) Giroud, (Kylian) Mbappé y sí, tengo sentimientos encontrados. Si no estuviera jugando contra Argentina, estaría 100% detrás de Francia. Pero por supuesto apoyaré a la Argentina”, dice Julieta Riveros, una especialista en comercio internacional que lleva unos meses aprendiendo francés cuando supo que tenía una bisabuela francesa.

Más abierta lingüísticamente y unida que otras comunidades, la migración francesa –de los Pirineos, Saboya, Alsacia y Corrèze– se ha integrado o “argentinizado” más rápido que otras. Y un recuerdo lejano, incluso la reminiscencia de un sabor, no altera la lealtad al fútbol si no se aborda.

En Pigüé, en medio de la nada, a unos 550 km de Buenos Aires, se prepara una tortilla enorme una vez al año, y también se puede comer aligot. En este pueblo de 17.000 habitantes, fundado en 1884 por 40 familias de Aveyron, el triunfo de los ‘Bleus’ en 2018, aunque no se celebró en la calle, fue recibido con banderas francesas en las ventanas, recuerda Yamil Sevenants, de 54 años y desde hace un tiempo delegado de la hermandad entre los dos pueblos.

“Siempre decimos: tenemos raíces francesas, estamos orgullosos de lo que hicieron nuestros antepasados ​​para fundar una ciudad como esta. Pero nos sentimos argentinos. Apoyaremos con cariño a la Argentina”, dijo a la AFP el bisnieto de la AFP. La pareja, que era de Decazeville y Bozouls.

“Tenemos toda la confianza de que tenemos un excelente equipo y que ganaremos la copa el domingo. Los argentinos estamos todos muy emocionados por nuestro turno”, dijo.

– Francofilia –

Además de estos primos lejanos, Francia también atrae a un “público joven, una generación que no necesariamente tiene una conexión directa con Francia”, dice Pascal Casanova, director de Alliance Française, quien ve a los argentinos como “francófilos en general”. “Esperamos que este sentimiento dure”, dice.

Una idea compartida por Hernán Otero. “Argentina está muy ligada a la herencia francesa. Históricamente, era muy francófilo”, dice.

La proximidad a veces sorprende: como la hipótesis de que las franjas blancas y celestes del pantalón del personaje de cómic Obelix se inspiraron en el uniforme del Racing de Avellaneda, el club de René Goscinny, que vivió en Argentina entre 1928 y 1945, era un aficionado.

Pero los que tendrán el mayor dilema el domingo serán los franco-argentinos de primera generación. Yannis Buchot, quien vive en Buenos Aires desde hace 20 años y dirige un bar nocturno que transmite partidos de la Copa del Mundo, dice que Francia está “a años luz de entender lo que está pasando aquí”. Esto es fútbol, ​​fútbol y fútbol”.

Yannis está casado con un argentino y tiene una hija de 15 años que se siente argentina y un chico de 18 que es hincha del Olympique de Marsella. “Puede que sienta un 51% o un 50,01% por Francia y el resto por Argentina. O tal vez me miente un poco. Pero supongo que el domingo estará contento sea cual sea el resultado”, dijo sobre su hijo.

ard-pbl/nn/gfe/aam

© Agencia France-Presse

Sofía Canizares

"Amante de los zombis sin remordimientos. Experto independiente en las redes sociales. Organizador malvado. Escritor incurable. Adicto al café".

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *