LIMA, 24 jun (Reuters) – El ya tenso proceso electoral en Perú se vio aún más perturbado después de que uno de los cuatro jueces del jurado que revisaba las boletas impugnadas renunció luego de un enfrentamiento con los otros funcionarios por las solicitudes de anulación de los votos.
Luis Arce dijo el miércoles por la noche que renunciaría a su cargo después de que el jurado rechazara las primeras diez mociones para anular los votos de la derechista Keiko Fujimori, quien quedó justo detrás del socialista Pedro Castillo en la votación del 6 de junio.
Fujimori ha hecho acusaciones de trampa con pocas pruebas y ha buscado descalificar los votos a favor de Castillo. Los observadores electorales dijeron que la votación se llevó a cabo limpiamente, mientras que el Departamento de Estado de EE. UU. dijo que era un “modelo de democracia”.
La reñida elección dividió severamente a la nación andina rica en cobre, y hubo marchas y protestas casi diarias en la capital, Lima.
Arce afirmó en una carta de renuncia que el jurado fue parcial y que “ya se tomaron decisiones”. Su salida podría retrasar la confirmación del resultado ya que el jurado maneja las papeletas en disputa con apenas 44.000 votos entre los candidatos.
El JNE, en su cuenta de Twitter, desestimó las acusaciones de parcialidad de Arce como “ofensivas” y dijo que un juez no debería renunciar a mitad de la revisión, por lo que en su lugar sería suspendido y se encontraría un reemplazo interino “para retrasar nuestro trabajo”.
El partido Perú Libre de Castillo dijo el jueves que la renuncia tenía como objetivo “evitar la proclamación de Pedro Castillo, ignorando así el referéndum, rompiendo la democracia y dando un golpe de Estado con guantes de seda”.
El partido conservador Fuerza Popular de Fujimori ha presentado cientos de apelaciones con al menos 200.000 votos.
Un abogado de Fuerza Popular dijo que ante la renuncia del juez, el gobierno debería considerar pedirle a la Organización de Estados Americanos (OEA) que revise el proceso electoral, como lo hizo en la vecina Bolivia tras las disputadas elecciones de 2019.
En un comunicado, la OEA dijo que su misión en el país no encontró ningún error en la realización de las elecciones.
Castillo, un ex geek y líder sindical, ha inquietado a la élite política, las empresas mineras y los mercados de Perú con planes para redistribuir los recursos y reescribir la constitución. Sin embargo, ha suavizado su retórica en las últimas semanas.
Información de Marco Aquino; Editado por Adam Jourdan, Jonathan Oatis y Daniel Wallis
Nuestros estándares: Los principios de confianza de Thomson Reuters.
“Analista. Gamer. Explorador amistoso. Amante de la televisión incurable. Aficionado a Twitter. Erudito de las redes sociales. Geek aficionado a la web. Orgulloso gurú de los zombis”.