Argentina, que ha estado en recesión desde 2018, está lista para una fuerte contracción del 12% este año.
El coronavirus está cambiando el mundo de formas sin precedentes. Suscribirse a Aquí para una sesión informativa dos veces por semana sobre cómo esta crisis global está afectando a las ciudades, la tecnología, los enfoques del cambio climático y la vida de las personas vulnerables.
Por Miguel Lo Bianco y Marina Lammertyn
BUENOS AIRES, 16 sep (Reuters) – Mientras la pandemia del coronavirus azotaba Argentina, el pintor Gonzalo Esquivel no sabía que era el comienzo de una crisis personal que eventualmente lo llevaría a vivir en un terreno baldío, mientras miles de personas más fueron expulsadas. de sus hogares.
Con su trabajo interrumpido por el virus, Esquivel, de 23 años, no ha podido pagar el alquiler. Hoy vive en una favela improvisada que surgió cuando personas que habían perdido sus casas comenzaron a ocupar un terreno cerca de la ciudad de Guernica, en la provincia de Buenos Aires.
“Ya no podía pagar el alquiler y terminé en la calle”, dijo Esquivel. “He vendido mis muebles, mi televisor, mis cosas… No tengo adónde ir”.
Argentina, que ha estado en recesión desde 2018, está lista para una fuerte contracción del 12% este año. La pandemia ha disparado la pobreza y el desempleo, expulsando a más personas de sus hogares.
Miles de familias se han instalado en los campos en barracones de hojalata, plástico, madera y cartón. La mayoría llegó en julio, cuando Argentina aún estaba bajo un estricto bloqueo que detuvo la mayor parte del comercio.
“Necesitamos un lugar permanente para alimentar a mi familia, a mi bebé, porque un día puedo tener trabajo y al otro no”, dice Carolina Rivero, madre desempleada de un hijo discapacitado.
La tasa de desempleo de Argentina fue del 10,4% en el primer trimestre, según muestran los datos del gobierno. Un pronóstico de la consultora Ecolatina situó la cifra en 14% para el segundo trimestre, equivalente a unos 400.000 desempleados.
Alrededor de 3,6 millones de familias argentinas se ven afectadas por la falta de vivienda, según datos del gobierno, lo que ha provocado un aumento de la ocupación ilegal en todo el país.
En Guernica, los funcionarios están tratando de desalojar a las familias que ocupan el terreno de 98 acres para fines de septiembre.
(Reporte de Miguel Lo Bianco y Maria Lammertyn; Escrito por Cassandra Garrison; Editado por Rosalba O’Brien)
“Reader friendly. Unable to write with boxing gloves on. Lifelong beer guru. General TV fanatic. Award-winning organizer.”