El canje se produce en un momento de plena crisis en la economía argentina, con una inflación superior al 60%, un elevado déficit presupuestario y crecientes temores de incumplimiento de la deuda soberana Suceso inesperado de Martín Guzmán el día anterior. El presidente Alberto Fernández anunció a través de Twitter el nombramiento de Batakis, de 53 años, como exministra de Economía de la provincia más grande y rica de Argentina, Buenos Aires, de 2011 a 2015. FMI), dimitió tras constantes enfrentamientos con el ala militante de la coalición gobernante leal a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que desaprobaba sus políticas fiscales más estrictas. Problemas económicos Batakis llega en un momento de crisis en la economía argentina, con una inflación superior al 60%, un alto déficit presupuestario y crecientes temores de impagos, la pérdida de credibilidad del peso y su devaluación. El nuevo ministro es visto como más aliado del ala militante de la coalición gobernante peronista, que quiere más gasto público para aliviar los altos niveles de pobreza de Argentina. “No existe tal cosa como la pobreza decente”, escribió en su cuenta de Twitter. “Es solo pobreza y tenemos que combatirla”. Esto está en contradicción directa con las disposiciones del acuerdo del FMI para reducir el déficit presupuestario, aumentar las reservas y reducir la financiación del banco central. Uno de los escépticos de la designación es Matias Carugati, economista de la consultora Seido, quien destaca la falta de información sobre las posiciones políticas de Batakis: “Ahora tenemos un ministro, pero todavía no tenemos un plan económico”. Miedo al impago El malestar político en Argentina se encuentra con un clima de incertidumbre económica. La potencia agrícola ha luchado contra la inflación de más del 60% en los últimos 12 meses. Las huelgas de camioneros por falta de diesel también están dañando la economía. La abrupta salida de Guzmán mete al país en problemas, ya que tenía previsto viajar a Francia esta semana para renegociar un acuerdo de deuda de 2.000 millones de dólares con el grupo acreedor del Club de París. La deuda original de Argentina de $ 57 mil millones fue la más grande jamás emitida por el FMI. El último tramo del acuerdo fue rechazado por el presidente Fernández después de que reemplazó a su antecesor liberal, Mauricio Macri. Con el aumento de la inflación y la caída de las reservas de divisas debido a los altos costos de importación de energía, los inversionistas cuestionan la capacidad del país para cumplir con sus obligaciones de deuda. Los rendimientos de los bonos gubernamentales se encuentran entre los más altos del mundo, lo que indica una falta de confianza de los inversores. Argentina ha incumplido su deuda nacional nueve veces desde que se independizó de España en 1816, y tres veces en este siglo, la mayor a fines de 2001. rw/av (AFP, AP, Reuters)

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