En Argentina se hackeó una base de datos que contiene la información de identidad de toda la población del país. Los piratas informáticos los ponen a la venta en un foro de piratas informáticos.
Los datos de identidad de ciudadanos argentinos se han visto comprometidos. Los piratas informáticos han logrado irrumpir en la red informática del gobierno argentino y robar los datos del cédula de identidad de toda la población del país, aproximadamente 45 millones de personas. Este hackeo, que tuvo lugar el pasado mes de septiembre, apuntó específicamente al archivo Renaper, el registro nacional de personas del país. Los datos ya están a la venta en Darknet.
Si bien el anuncio se puede ver actualmente en un foro de piratería, los piratas inicialmente lo promocionaron en Twitter utilizando una cuenta recién creada llamada @AnibalLeaks. Publicaron datos de una pequeña muestra de 44 celebridades en la red de microblogging, incluida la estrella del fútbol Lionel Messi y el presidente del país, Alberto Fernández.
Los datos recuperados incluyen nombres completos, direcciones, fechas de nacimiento, información de género, fechas de emisión y vencimiento de la cédula de identidad, número de identificación, fotografías, etc. La grabación, quien se puso en contacto con uno de los piratas, pudo confirmar la autenticidad de los artículos. Con esta información, los delincuentes podrían muy bien crear documentos de identidad falsificados.
En uno comunica El Ministerio del Interior argentino, con fecha del 13 de octubre, dijo que su equipo de seguridad descubrió que se utilizó una cuenta VPN asignada al Ministerio de Salud para consultar la base de datos de Renaper en busca de 19 fotos en el momento exacto en que fueron tomadas. “La base de datos no ha sufrido una brecha o fuga de datos”. Una versión que contradice el intercambio entre La grabación y el pirata informático que posee una copia de los datos de Renaper.
El hacker también amenazó con divulgar los datos de uno a dos millones de personas y vender el acceso a los datos a todos los compradores interesados.
“Reader friendly. Unable to write with boxing gloves on. Lifelong beer guru. General TV fanatic. Award-winning organizer.”