El presidente argentino, Alberto Fernández, anunció que Argentina saldrá oficialmente del aislamiento social, que se cree que es el más largo del mundo, con la excepción de dos ciudades. Fernández instó a la población a continuar con las labores de protección y no relajar los cuidados, así como ha sido criticado por organizar el velorio de Diego Maradona sin distanciamiento social ni protección.
“Hemos notado que el número de casos ha bajado cerca de un 30% en el país en las últimas dos semanas. Solo mantendremos el aislamiento social en dos ciudades: Bariloche y Puerto Deseado (ambas en la Patagonia). Esta nueva etapa se extenderá hasta el 20 de diciembre”, anunció el presidente Alberto Fernández, quien subrayó que “la población debe continuar con sus esfuerzos porque el problema de la pandemia aún no termina”.
El llamado a los argentinos a continuar con el esfuerzo llegó la noche del viernes, un día después de las gigantescas aglomeraciones en torno al exjugador Diego Maradona organizadas por el propio gobierno.
La ceremonia, en la que cerca de un millón de personas no observaron las medidas de distanciamiento social y protección, llevó a la oposición a denunciar penalmente al presidente Alberto Fernández por haber facilitado la propagación del virus. Coronavirus.
“Deberíamos evitar las imágenes que vimos del velorio. Eso sí, son un riesgo epidemiológico cuyos efectos vamos a ver en siete o diez días”, criticó el ministro de Salud bonaerense, Fernán Quirós.
Era el turno del interior
El anuncio del fin de la cuarentena se aplica a diez de las 24 provincias argentinas, la mayoría del interior. En el Área Metropolitana de Buenos Aires, el fin de la llamada “cuarentena eterna” comenzó el 9 de noviembre tras 233 días de aislamiento.
Sin embargo, el fin de la cuarentena no acabó con las restricciones. El transporte público, por ejemplo, queda exclusivamente para actividades que se consideran esenciales.
La extensión de la cuarentena ayuda a entender el drástico descenso de la popularidad de Alberto Fernández, quien, según la consultora Giacobbe & Asociados, tenía una imagen positiva de 67,8% en marzo y ahora tiene 32,4%.
“Es un proceso vertiginoso de desilusión”, dijo a RFI el politólogo Jorge Giacobbe, autor del estudio, publicado por última vez esta semana.
“Los números muestran que la cuarentena ya no tenía sentido. El error fue utilizar la cuarentena como única forma de combatir la pandemia. El gobierno no tenía margen para proceder con la pandemia toque de quedamientras que los casos van en aumento”, afirma el analista.
El estudio también señala que el 64,2% de los argentinos está de acuerdo con el paso del aislamiento al distanciamiento social. “Los argentinos estamos agotados. El agotamiento social después de ocho meses está al límite. La fase racional de la cuarentena terminó hace meses”, concluye Giacobbe.
Aguanta hasta la vacuna
El mandatario también esbozó la nueva meta del país frente a la pandemia: vacunar al mayor número de personas posible entre enero y marzo, cuando comienza el otoño.
“Tenemos la ventaja de ver lo que está pasando con la pandemia en el hemisferio norte. Una segunda ola con un número de contagios realmente alarmante. Es muy posible que Argentina enfrente una segunda ola. más fácil será afrontar el otoño”, comparó Fernández.
Para evitar este espejo europeo, Argentina quiere vacunar a 13 millones de personas.
“Cuando llegue marzo queremos que todos los grupos de riesgo estén vacunados. El total de personas que deberíamos vacunar entre enero y marzo es de 13 millones de personas, alrededor del 25% de los argentinos. Este es el esfuerzo que debemos afrontar ahora”, señaló el Presidente.
Después de marzo, se continuará con la vacunación en aquellos que no estén en riesgo. La vacuna será gratuita para la población pero no obligatoria.
“Hago un llamado a todos a ser parte de esta epopeya que se preocupa por la salud. Necesitaremos unos 20.000 voluntarios. Con todo su esfuerzo Argentina puede vacunar entre 4,5 y 5 millones al mes”, calculó Fernández.
A pesar de tener la cuarentena más larga y estricta del mundo, Argentina es el noveno país con más casos, aunque es uno de los menos probados. Hay 1.407 millones de infectados y 38.216 muertos.
Ocupa el puesto 23 en términos de población, detrás de Brasil (28), Perú (30) y Chile (32), países sudamericanos con la tasa de casos más alta. En términos de población, Argentina ocupa el 8° lugar en cuanto a número de muertes, Perú aparece en el 3° lugar y Brasil en el 11°.
“Escritor amigable con los hipster. Entusiasta de la televisión. Organizador. Emprendedor general. Pionero de Internet”.