DOHA/RABAT: Los fanáticos marroquíes celebraron el jueves que su país se convirtió en la única nación árabe en llegar a las etapas eliminatorias de la primera Copa del Mundo que se celebró en un país árabe, bailando y animando en el estadio de Qatar y en las calles de casa.

Marruecos venció a Canadá 2-1 para encabezar su grupo en un estadio repleto de aficionados. En juegos anteriores, habían empatado con Croacia y habían ganado sorpresivamente a Bélgica, el segundo equipo del mundo.

“¡Este equipo puede llegar muy lejos en este Mundial!”, gritó una joven envuelta en una bandera marroquí, asomándose por la ventanilla de un coche abarrotado en Rabat mientras la gente corría hacia un barrio céntrico para asistir a las celebraciones callejeras.

En Qatar, donde el conjunto local ya ha sido eliminado junto con Arabia Saudí y Túnez, Marruecos viste ahora el manto de un mundo árabe que ha celebrado las victorias de selecciones árabes frente a algunos de los favoritos del torneo.

Cientos de hinchas se agolparon fuera del estadio, algunos empujándose y otros tratando de saltar una valla para entrar incluso después de que había comenzado el partido, dijo un periodista de Reuters allí. A muchos les faltaban entradas pero esperaban ver el partido.

“Los fanáticos se aglomeraron aquí porque no pueden ingresar al estadio. Casi todos estos aficionados no tienen entrada y les encanta Marruecos y quieren entrar”, dijo uno, Abdulmajid Mohammed, de Arabia Saudí.

De la multitud también salieron algunos aficionados que decían tener entradas que no podían entrar. “Tenemos boletos, pero cerraron todas las puertas y no dejan entrar a la gente”, dijo Mohammad Abdelhadi de Libia, quien dijo que los boletos de su grupo cuestan más de $200 cada uno.

La FIFA y los organizadores de la Copa del Mundo de Qatar, el Comité Supremo para la Entrega y el Legado, no respondieron de inmediato a una solicitud de Reuters de comentarios sobre la multitud fuera del estadio.

El apoyo ensordecedor fue un 12º hombre por el lateral.

“Demostraron en la cancha que son leones… honestamente, como Arabia Saudita perdimos ayer, pero lo compensamos con la victoria de Marruecos”, dijo Talal Ahmed Obeid, mirando en una zona de fanáticos en Casablanca.

Si bien Marruecos es un miembro orgulloso de la Liga Árabe, el país también ha adoptado su identidad africana y su ascendencia bereber en las últimas décadas, consagrando el amazigh como su idioma oficial.

“Esperamos enarbolar la bandera del fútbol africano”, dijo el miércoles el técnico marroquí Walid Regragui.

Mohamed Tahiri, un abogado que se divirtió entre multitudes en Rabat a pesar del clima lluvioso, ondeando banderas y tocando la bocina de los autos, dijo que Marruecos era el único equipo con el que los árabes podían identificarse.

“Esta es una fiesta no solo para nosotros los marroquíes, sino para todos los árabes y también para todos los amazigh del norte de África”, dijo.

La gente había estado buscando cafés con televisores para ver el partido horas antes del inicio.

“Es el primero para mi generación”, dijo Oufae Abidar, de 38 años, empleado de la empresa. Era una niña pequeña cuando Marruecos llegó por última vez a las etapas eliminatorias en 1986. La última aparición de Marruecos en la Copa del Mundo hace cuatro años terminó en la fase de grupos.

De vuelta en Doha, el ciudadano omaní Saeed Al Maskari, de 30 años, dijo que ahora apoyaría a Marruecos. “Nosotros estamos en la parte asiática (la región árabe) y ellos están en la parte africana. Pero hablamos un idioma”, dijo.