Carlos Saúl Menem nació el 2 de julio de 1930 en Anillaco, Argentina, como uno de los cuatro hijos de los inmigrantes sirios Saúl y Mohibe Akil Menem. Su padre, comerciante, envió a todos sus hijos a la universidad. Carlos Saúl asistió a la Universidad Nacional de Córdoba, en la segunda ciudad más grande de Argentina. En 1955 completó su licenciatura en derecho y se convirtió en un apasionado peronista.

En 1966 se casa con Zulema Yoma. tuvieron dos hijos, Zulema Menem y Carlos Saúl Jr., y se divorciaron en 1991. En 2001 se casó con Cecilia Bolocco. Tuvieron un hijo, Máximo, y se divorciaron en 2011. Carlos Saúl Jr. murió en un accidente de helicóptero en 1995.

Excepto su Hija Zulema Menem y su hijo Máximo Menem Bolocco, los sobrevivientes son otro hijo, Carlos Nair Menem y un hermano, Eduardo.

Cuando Perón fue derrocado en 1955, el Sr. Menem fue detenido brevemente. Más tarde se unió al Partido Justicialista, sucesor del Partido Peronista. En 1973, tras su regreso del exilio, Perón volvió a tomar el poder. El Sr. Menem, que dirigía su partido provincial, fue elegido gobernador de la provincia de La Rioja.

Perón murió en 1974 y fue sucedido por su tercera esposa, Isabel Martínez de Perón, quien fue depuesto en 1976 por una junta que también derrocó al Sr. Menem y lo encarceló durante varios años. En 1983, tras el colapso de la junta, el Sr. Alfonsín fue elegido presidente y el Sr. Menem fue reelegido gobernador de la provincia de La Rioja. En 1987 fue reelegido.

En 1989, cuando la economía argentina cayó bruscamente, Menem fue elegido presidente a pesar de la gran incertidumbre sobre lo que representaba. Los analistas dijeron que su popularidad, como la de Perón, reside en su atracción personal más que en cualquier programa que no haya podido describir.

“Menem es una especie de Reagan”, dijo un prominente peronista al Times durante la campaña. “Es un gran comunicador con una docena de ideas básicas, que tiene un gran instinto para tratar con la gente, pero tiene poco interés en ideas programáticas detalladas. El resultado es inevitablemente cierta ambigüedad, pero eso no preocupa a sus seguidores “.