Recientemente han quedado expuestas las peores prácticas que se pueden llevar a cabo en una república que pretende defender el estado de derecho. “Hemos visto una incursión inadmisible del poder judicial hacia los demás”, subrayó el presidente Fernández en un mensaje al pueblo argentino difundido esta mañana.

Los mensajes intercambiados entre el ministro de Justicia y Seguridad de la capital, Marcelo D’Alessandro, y Silvio Robles, vocero de Rosatti, han sido dados a conocer en los últimos días.

Según el diario Página 12 y la agencia de noticias Télam, durante estas conversaciones, Robles le informó a D’Alessandro de una decisión de la CS de aumentar los fondos de participación para esa ciudad y le indicó qué hacer.

Fernández denunció la existencia de “una asociación, conducta y diálogos escandalosos entre funcionarios judiciales y políticos de la oposición, en los que se anticipan decisiones y se recomiendan justificaciones para decidir casos de indiscutible trascendencia institucional”.

Cuando asumí el cargo, juré defender la Constitución. “Debo evitar que el Consejo de la Magistratura sea más manipulado con interpretaciones jurisprudenciales inusuales que permitan al poder judicial interferir en las decisiones del Congreso”, afirmó.

Es mi deber impulsar la acción cuando el sistema federal entra en crisis por una medida cautelar innecesaria y la propuesta inapropiada de una ciudad autónoma, agregó, en referencia al apoyo de la CS para aumentar los fondos para esta capital.

El Presidente anunció que solicita a los gobernadores apoyar un juicio contra Rosatti para investigar su conducta en el desempeño de sus funciones.

También tendremos que indagar sobre el comportamiento de los demás miembros del Tribunal Supremo. Además, instruiré al Ministro de Justicia y Derechos Humanos, Martín Soria, para que impulse las actuaciones delictivas pertinentes para investigar los presuntos hechos de corrupción de funcionarios de esta ciudad con contratistas de este estado autónomo.

Mi deseo es que en 2024, cuando celebremos 40 años de democracia, estemos de acuerdo en construir un estado de derecho en el que el poder judicial castigue a los responsables sin pactos de impunidad y en el que los políticos olviden para siempre las prácticas corruptas que han dañado su credibilidad causado gran daños, afirmó.

Sepan que cumpliré mi juramento y haré cumplir la Constitución, concluyó.

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